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| El colorido de los diversos platos arquipeños |
Al igual que en Salta y el resto de las provincias del interior argentino, las cocinas regionales son una parte fundamental de la expresión cultural de un pueblo. En Arequipa se trata de una expresión muy arraigada que al saborear alguno de sus ricos y picantes platos se puede sentir inequívocamente la idiosincrasia del lugar. Generosos y hasta abundantes, los platos típicos de los arequipeños tienen una profunda influencia en el mestizaje entre una cocina andina y una española, entre los productos naturales de su costa y los de la altura andina.
Un clásico antes del plato principal en Arequipa es la sopa, para ellos denominado “chupe” (expresión en lengua quechua), una de las tantas sopas que tienen es el “chaque”: papas, carne, verduras, tripas y mondongo, o el “pobre”: carne de ave, chuño y frejoles.
Además de este caldo espeso bien
arequipeño, entre los diferentes platos tradicionales, muchos de ellos típicos
en todo Perú, como la entrada conocida Ocopa (papa a la huancaína), el plato
frío más popular de la región, el soltero de queso, ensalada donde predominan
las habas y el queso frío, y tiene ese nombre por no llevar carne.
Entre los platos principales se destacan el rocoto relleno (rocoto
horneado con picadillo de carne, especies, queso, huevos y leche); el adobo
(caldo espeso bien picante de carne de cerdo); el asombroso “cuy” para nosotros
“cui”, ese delicado roedor que a muchos les cae simpático pero otros no lo
pueden ni ver, y menos en un plato frito con su cabecita y su cuerpito.
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